EL VIENTO


El viento puro sopla por doquier

¿Cuantas veces no sucede que porque hay algo que nuestra conciencia no sabe clasificar, porque hay algo que no encaja en nuestro esquema mental, rechazamos?. Pero es que hay cosas que hasta al corazón se le escapan y que los ojos de un buda no comentan ¿Cómo podrían estas no estar lejanas a la comprensión?

Tal vez porque el viento no conoce dirección. Porque cuando el viento es puro, es puro porque no tiene nombre ni conoce hogar. El viento no distingue entre océano o mar, acariciando así toda existencia por igual al pasar. El viento no escoge entre esto o aquello, no distingue entre MI ni FA y por eso sabe hacer cantar todas las hojas por igual. Y así cantan los ríos, canta la montaña, canta el mar. Así canta todo ser. Cuando el viento puro sopla no hay ni árboles pequeños ni árboles grandes porque todo el valle recita la misma oración. Entonces: ¿Es que se mueven las ramas solo, o es que las hojas, cuando las roza el viento, cantan una canción? Si no lo ves, tal vez será porque el mundo es aun muy reciente. Quedan muchas cosas que carecen de nombre aun.

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